Al solicitar una marca, corresponde al solicitante asegurarse de la viabilidad jurídica de su marca comparándola con marcas preexistentes y también con todo tipo de nombres, nombres comerciales, signos, nombres de dominio, derechos de autor, signos.
Por lo tanto, es necesario realizar una búsqueda exhaustiva en Internet, así como en los registros de empresas y marcas u otros catálogos.
Este tipo de búsqueda revelará normalmente nombres idénticos, que el solicitante evitará o comprobará en busca de una posible coexistencia.
No corresponde a la oficina de marcas realizar tales comprobaciones, que pueden resultar engorrosas y, en cualquier caso, no proporcionan una certeza absoluta.
Un tercero siempre puede sentir que se han infringido sus derechos, sobre todo cuando un nombre o logotipo es similar a su propio signo, especialmente cuando este último es muy conocido y se refiere al mismo territorio de ventas o a actividades similares o relacionadas.
Litigios sobre nombres de dominio
Derecho de marcas: el riesgo de confusión también afecta a las marcas escasamente distintivas